FÁBULA: LOS DOS AMIGOS Y EL OSO

FÁBULA DE SAMANIEGO

Félix María Samaniego (Laguardia, Álava, 12 de octubre de 1745-Laguardia, 11 de agosto de 1801) fue un escritor español famoso por sus fábulas. Les dejo aquí una adaptación audiovisual de Los dos amigos y el oso.


LECTURA:
Dos hombres que se consideraban buenos amigos paseaban un día por la montaña. Iban charlando tan animadamente que no se dieron cuenta de que un gran oso se les acercaba. Antes de que pudieran reaccionar, se plantó frente a ellos, a menos de tres metros.

Horrorizado, uno de los hombres corrió al árbol más cercano y, de un brinco, alcanzó una rama bastante resistente por la que trepó a toda velocidad hasta ponerse a salvo. Al otro no le dio tiempo a escapar y se tumbó en el suelo haciéndose el muerto. Era su única opción y, si salía mal, estaba acabado.

El hombre subido al árbol observaba a su amigo quieto como una estatua y no se atrevía a bajar a ayudarle. Confiaba en que tuviera buena suerte y el plan le saliera bien.

El oso se acercó al pobre infeliz que estaba tirado en la hierba y comenzó a olfatearle. Le dio con la pata en un costado y vio que no se movía. Tampoco abría los ojos y su respiración era muy débil. El animal le escudriñó minuciosamente durante un buen rato y al final, desilusionado, pensó que estaba  más muerto que vivo y se alejó de allí con aire indiferente.

Cuando el amigo cobarde comprobó que ya no había peligro alguno, bajó del árbol y corrió a abrazar a su amigo.

-¡Amigo, qué susto he pasado! ¿Estás bien? ¿Te ha hecho algún daño ese oso entrometido? – preguntó sofocado.

El hombre, sudoroso y aun temblando por el miedo que había pasado, le respondió con claridad.

– Por suerte, estoy bien. Y digo por suerte porque he estado a punto de morir a causa de ese oso. Pensé que eras mi amigo, pero en cuanto viste el peligro saliste corriendo a salvarte tú y a mí me abandonaste a mi suerte. A partir de ahora, cada uno irá por su lado, porque yo ya no confío en ti.

Y así fue cómo un susto tan grande sirvió para demostrar que no siempre las amistades son lo que parecen.

Moraleja: La amistad se demuestra en lo bueno y en lo malo. Si alguien a quien consideras tu amigo te abandona en un momento de peligro o en que necesitas ayuda, no confíes demasiado en él porque probablemente, no es un amigo de verdad.


FÁBULA EN FORMA DE RIMA:

A dos Amigos se aparece un Oso:
El uno, muy medroso,
En las ramas de un árbol se asegura;
El otro, abandonado a la ventura,
Se finge muerto repentinamente.
El Oso se le acerca lentamente;
Mas como este animal, según se cuenta,
De cadáveres nunca se alimenta,
Sin ofenderlo lo registra y toca,
Huélele las narices y la boca;
No le siente el aliento,
Ni el menor movimiento;
Y así, se fue diciendo sin recelo:
«Este tan muerto está como mi abuelo.»
Entonces el cobarde,
De su grande amistad haciendo alarde,
Del árbol se desprende muy ligero,
Corre, llega y abraza al compañero,
Pondera la fortuna
De haberle hallado sin lesión alguna,
Y al fin le dice:
«Sepas que he notado
Que el Oso te decía algún recado.
¿Qué pudo ser?»
«Diréte lo que ha sido;
Estas dos palabritas al oído:
Aparta tu amistad de la persona
Que si te ve en el riesgo, te abandona.»


ACTIVIDADES PARA DESPUÉS DE LA LECTURA:




 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

NOS VAMOS AL MERCADO

  Estimadas familias, niños y niñas: Después de dos semanas inmersos en monedas y billetes, hoy ha llegado el momento de comenzar a experime...